Carnaval de Panamá
motor de cultura y economía
El Carnaval es una explosión de alegría y color que vibra por las calles de Panamá, y tiene sus raíces alrededor de 1850.
Esta fiesta se enlaza con el pasado colonial del país, evocando a reyes, reinas, indígenas y conquistadores a través de los trajes y el teatro callejero.
Orígenes del Carnaval
Es una de las festividades más populares no solo en Panamá, sino en países con práctica cristiana, usualmente ocurre durante los tres días previos al Miércoles de Ceniza y su nombre deriva del latín “carnem levare”, que significa “quitar la carne.
Históricamente, durante este periodo, todo estaba permitido, lo que explica la tradición de disfrazarse, usar máscaras y mantener el anonimato.
En nuestro país representa además un motor económico que impulsa varias industrias y provee oportunidades de ingresos.
Panamá abre sus puertas para que extranjeros se contagien y experimenten nuestra rica identidad cultural que incluye la música, el baile, las artesanías y la gastronomía, lo que ayuda a las pequeñas empresas y artesanos a ganar visibilidad y clientes.
Embajador de la sostenibilidad turística
La Autoridad de Turismo de Panamá reporta que el Carnaval genera más de 400 millones de dólares en ingresos.
Durante los cuatro días de fiestas se benefician diversos sectores de la economía panameña, en su versión 2023, atrajo a más de 100 mil visitantes, impulsando diversas industrias y aumentando la ocupación hotelera, especialmente en la Ciudad de Panamá y Las Tablas.
La hospitalidad panameña juega un rol crucial en la promoción del turismo sostenible y el respeto por la diversidad cultural.
La manera en que los visitantes son tratados influye en la imagen global de Panamá y en la atracción de futuros turistas.
La educación sobre sostenibilidad, como promover prácticas ambientalmente responsables y educar a los visitantes sobre el impacto de sus acciones, es esencial para preservar el entorno natural y cultural del país.
Un turismo exitoso y sostenible beneficia a la economía local, mejora las infraestructuras y aumenta el empleo panameño.